viernes, 26 de junio de 2009

Resolviendo el mundo

El ruido de los profetas
de estos tiempos
limpia las miserias
de esta humanidad.
Las heridas parecen
menos, las guerras
suenan más flojas
cuando las bombas
estallan al otra lado
del que dice tener la razón.
Pero todos somos tolerantes
del telediario de imágenes duras,
volvemos la cabeza
y seguimos como si nada, ya acostumbrados,
con nuestras lentejas,
los intolerantes son espectros
en este siglo.
Si el amor, en estos tiempos,
no fuese más difícil que la trigonometría...
Te diría que hoy la gente
se quiere más, pero el dinero
sigue siendo el rey de los amantes.
Quizás si el hambre no tuviese
cura, un poquito de allí y de acá,
no tendría que mirar hacia
otro lado cuando pienso
que todo empieza por uno,
aunque es fácil decir que
son sólo los importantes los que
tienen que actuar,
que tampoco lo hacen...

1 comentario:

sardinita dijo...

como decia Bardem en la película de los lunes al sol, esto es como una escalera de domino, cae uno y detrás va el otro y detrás el otro....
Gracias por tu poesia
:*